Es el año 1892, y Oviedo se prepara para la inauguración del Teatro Campoamor, un acontecimiento histórico que marcará la finalización del proyecto de veinte años para edificar la calle Uría. La evolución del centro económico de la ciudad, sin embargo, no interesa tanto a los habitantes de los barrios pobres situados más allá del Casco Antiguo, que se sienten ignorados y despreciados por las clases burguesas. Bárbara, hija de una noble inglesa y de un capitán del Ejército que dirige la Fábrica de Armas, está obligada a vivir entre estos dos mundos, viendo cada día como sus ideas liberales son puestos a prueba por la clasista sociedad ovetense.